Karel García - 2012 - Verso a la piedra

Karel García - 2012 - Verso a la piedra

ENTREVISTA

Karel García: «Tras la crisis habrá un despertar y, modestamente, quiero contribuir a ello con mis canciones»

por Luis Fernández Zaurín el 27/03/2012 

No era un desconocido, pero con su primer CD en solitario, Hambre de Quimeras, grabado en los estudios Ojalá de La Habana, con el apoyo de Silvio Rodríguez, quien participó en dos temas y en cuyos recitales en Madrid y Barcelona le invitó a actuar, Karel García se dio a conocer en el mundo de la trova y de la canción de autor.

Cinco años después estrena en el BarnaSants Verso a la piedra, un disco “de trovador”, trece temas donde la poesía cuando se acerca al ser humano y sus inquietudes y la lucidez cuando lo hace a asuntos más terrenales, son los protagonistas. 

El próximo día 30 de marzo presentas en Luz de Gas, dentro del BarnaSants, tu segundo CD, Verso a la piedra, ¿qué sensaciones tienes?

Las sensaciones son buenas y eso es muy positivo para un disco cuyo principal ingrediente es la amistad. En Verso a la piedra han participado, en todas las fases del proyecto, muchos amigos y quiero agradecerles a todos el haberlo hecho posible. Eso es lo más importante.

¿Cuál ha sido el proceso de creación de este disco?

Llevaba muchos meses con la idea de grabar y hablé con Jorge Sánchez, un amigo cubano afincado en Pamplona que me ofreció grabar en su casa. Allí tiene los medios suficientes y es más cálido. Así, cada viernes un poquito, el disco fue saliendo. Jorge también es trovador y lo cierto es que su optimismo y su afán de aventurarse en el proyecto para que saliera adelante fueron vitales para el disco. Luego otro amigo, Sergio Cascales, hizo la mezcla y la masterización en sus estudios Dune de Málaga. Sin el empeño y generosidad de Sergio, esto no se hubiera materializado. Por eso decía antes que el ingrediente más importante de este disco es la amistad.

¿Qué es Verso a la piedra?

Quizá una caricia poetrovada sobre la fría dureza que aparenta el ser humano actual. Algo de aliento al alma.

¿Por qué esa apariencia de frialdad del ser humano actual? ¿Qué le sucede? ¿Tendrá algo que ser el sistema económico que nos rige?

He dicho apariencia de frialdad porque estoy convencido de que no somos así en realidad. Los medios nos inundan con miedos y crisis al mismo tiempo que nos venden un modelo de vida basado en la explotación despiadada del planeta y de las personas que lo habitamos. El poder de tener, cueste lo que cueste. La esclavitud de las deudas en busca del paraíso de la autodestrucción. ¡Qué buen camino para que la gente no tenga tiempo ni ganas de conocer al vecino! Para que no pensemos más que en cómo pagar la hipoteca y la letra del coche. Para que la gente no interactúe con la gente y haya el peligro de que se puedan cambiar las cosas, hacerlo mejor. Eso no interesa a la tiranía financiera para la que trabaja el 80% de la población. Afortunadamente es una frialdad reversible, un sopor pasajero. La verdadera crisis es sistémica, el sistema que hace apenas veinte años, tras la caída del muro, se consideraba la panacea triunfante hoy es una barrabasada insostenible que llega a su fin. Tras la crisis habrá un despertar y, modestamente, quiero contribuir a ello con mis canciones.

Combinas canciones nuevas con algunas antiguas, ¿por qué? ¿Tienes muchos temas por rescatar?

He decidido “rescatar” como tú dices algunas canciones que había hecho y que siempre he creído que merecían estar grabadas; otras son más recientes. El conjunto es una mezcla de temas con diferentes edades creativas que he hilado lo mejor posible y he querido publicar porque, como decía, siempre he creído en ellas.

¿Tienes muchos temas por rescatar? ¿Qué sientes al recuperar un tema hecho ya hace algunos años?

A veces encuentro canciones que a pesar de tener algún tiempo parece que las hice mañana. Por eso les creo y las canto. Y también porque mi hermana Katia, que es una base de datos, de pronto me dice “¿…qué fue de aquella canción que hablaba de…? Entonces voy al rescate de su acierto.

Han pasado cinco años desde que salió tu último trabajo, Hambre de quimeras, ¿cuál fue tu experiencia con aquél trabajo? ¿qué te aportó como trovador?

Lo principal fueron las ganas de hacer otro disco. Paradójicas ganas, teniendo en cuenta que grabar y editar un disco hoy en día es casi una quimera para la economía del trovador. Pero el anterior trabajo me dejó, por así decirlo, con hambre de quimeras.

Háblanos un poco de tu experiencia con aquel trabajo…

El disco anterior fue un gustazo poder grabarlo en el estudio Ojalá rodeado de un gran equipo humano de músicos, técnicos y amigos. Fue un lujo contar con las colaboraciones de Frank Fernández, Vicente Feliú y el propio Silvio Rodríguez que produjo el trabajo. Un disco al que le tengo mucho cariño y que me ha ayudado mucho a dar a conocer mi trabajo.

Tu disco anterior llevaba un profuso acompañamiento instrumental, arreglos, etcétera y los temas de Verso a la piedra van a guitarra (y poco más) y voz, ¿cómo le sienta el instrumento a tus canciones?

Un trabajo que mezcla varios timbres de guitarra, voces y algo de percusión menor en algunas canciones es algo arriesgado en estos tiempos de superproducciones y radiofórmulas. Pero si crees en lo que haces es obvio que vale la pena intentarlo. La guitarra es la madre de las canciones del trovador, casi todas nacen de su sonido. Y creo que es el mejor atuendo para la canción que hago y al mismo tiempo también es el más cómodo de transportar.

Vamos por algunos de los temas de Verso a la piedra: ¿qué se puede decir del amor a estas alturas?

Para mi el amor es el lugar donde me lleno de palabras que luego, cuando me pierdo, cuando no sé regresar a él, digo en las canciones.

En cuanto al sentido de la vida, ¿lo tiene? En tus letras pareces dejar un sitio a la esperanza, ¿me equivoco?

Mi esperanza es que no te equivoques.

Finalmente, Cuba: ¿cómo ves la realidad de tu país desde esta distancia? ¿cuál es tu actitud ante esos cambios? ¿eres optimista?

Todo lo que sea para mejorar la realidad de los cubanos bienvenido sea. Pero que lo hagamos los cubanos. Vayamos donde vayamos, déjennos ir a nuestro paso.

Estamos ante una crisis mundial, ¿cuál es tu opinión sobre el asunto? ¿qué puede aportar un trovador en esta coyuntura en la que nos encontramos?

Canciones, eso es lo que puedo aportar. Las canciones pueden mover el sentir y la consciencia de las personas. Pueden revelarnos nuestra fuerza y nuestras debilidades, recordarnos nuestra humanidad. Hacernos ser mejores en ella.

Comienzas a cantar en 1990 ¿qué queda del adolescente que empezaba a componer sin manual y abrirse camino en las peñas de La Habana?

Las ganas de seguir cantando, de equivocarme y de aprender, la entrega en las canciones y en mi trabajo y algo de acné.

Tu apuesta, ¿sigue siendo a lo incierto?

Siempre a lo incierto, siempre a trovar. Esa es mi única certeza. Todavía mi creer es más joven que mi huir.

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Temas

01. Loa caníbal
02. Verso a la piedra
03. Bajo la historia de estos hijos
04. Inverdad
05. Mujer atuendo típico del triste
06. Guitarra
07. Tres acordes y tu piel (con Luis Eduardo Aute)
08. 16 preguntas cotidianas
09. Libertad de alambres
10. Esta caída
11. Como cíclopes
12. El canto me despeja
13. Sin aire ni bolero
14. Versión (El canto me despeja)

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