Rey Guerra - 2001 - De Sindo a Silvio
Un prisma de diferentes formas de hacer la música, con armonías en las que se combinan la densidad y la transparencia, los timbres de la percusión y el bajo con la guitarra, temas desconocidos de recio lirismo enlazados con canciones que han sido hits, hacen que la música se deslice sin aburrirnos nunca.
Laura Vilar | La Habana
Cuando Rey Guerra me pidió hiciera las palabras de presentación de su disco De Sindo a Silvio, confieso que sentí una gran emoción y orgullo, no sólo por la deferencia del gesto, sino por la confianza y respeto depositada en nuestro trabajo, por el calor amigo de sus palabras, por la transparencia en su mirada.
Desde ese día vienen resonando en mi mente muchas historias que pudieran aquí ser contadas, unas agradables, otras muy inquietantes pero no intrigantes. Y es que este artista de la guitarra, este artista de corazón, entrega y alma, ha puesto como eje central en su vida esta delicada pieza de madera preciosa y solo seis cuerdas. Todo él, su familia toda: vibra, sueña, construye y vive en torno a su arte, cualidad dada a los grandes artistas, ¡Qué privilegio!
En este disco que el Sello Unicornio presenta hoy para ustedes, Rey Guerra nos entrega lo mejor de sí, su experiencia, talento y profesionalidad. Por lo que a nombre de Unicornio y de todos en Abdala le ofrecemos nuestra gratitud, admiración y respeto.
Quisiera concluir citando las notas que escribiera Sergio Vitier en este disco, que además de bellas, expresan exactamente lo que es y propone Rey Guerra en él.
“Siempre sorprende con agrado que en un país de guitarristas como Cuba surja un artista emblemático, capaz de manejar tanto los estilos clásicos como la música popular y el jazz. Es el caso del Maestro Rey Guerra, que en este disco De Sindo a Silvio, nos hace una sugerente entrega de pasión y de rigor”.
Desde el fiel de nuestra más entrañable trova, Rey viaja por la canción de los grandes clásicos de antes y de ahora, recreando con versiones que —sin deformar los temas— buscan un nuevo acercamiento a estas melodías tan queridas por todos. La canción como principio de continuidad se ve contrastada en este álbum por el elemento de la danza, presente en obras del propio Rey, como “Santa Clara” y “A Baden Powel”, dándole una atractiva dinámica al discurso musical.
Un prisma de diferentes formas de hacer la música, con armonías en las que se combinan la densidad y la transparencia, los timbres de la percusión y el bajo con la guitarra, temas desconocidos de recio lirismo enlazados con canciones que han sido hits, hacen que la música se deslice sin aburrirnos nunca.
Agradezcámosle a Rey esta nueva entrega, y que suene la guitarra una vez más y para siempre”.
Muchas gracias
Teatro Amadeo Roldán, 28 de septiembre de 2001
Temas
01. Santa Clara
02. Perla Marina
03. Son homenaje
04. A Baden Powell
05. Ella y yo
06. Añoranza
07. El eco de las piedras
08. Fresa y chocolate
09. Quien tiene viejo el corazón
10. Dos amigos
11. Mercedes
12. Un día después
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